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El rumbo de las cosas.

La novedad con el rumbo de las cosas, es que por ahora no hay rumbo en ellas. Esto pareciera ser el resultado del sistema de enseñanza de la Medicina en México, en lugar de dar tiempo al conocimiento, agota mentalmente al residente hasta no querer hacer otra cosa que dormir y si se puede, en mi caso, disfrutar un poquito del aire libre de afuera del hospital...

Por lo pronto el IECA (así llamo a alguna persona) me exaspera, creo que no lo hace a propósito, pero... ¿Qué no lo educaron? o... ¿Qué diablos le pasa?

El Niagara en bicicleta.

No me digan que los médicos se fueron

no me digan que no tienen anestesia

no me digan que el alcohol se lo bebieron

y que el hilo de coser fue bordado en un mantel

Cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia, en los hospital no hay sedantes para los pacientes intubados, no hay antibióticos, casi no hay analgésicos, no hay guantes, no hay nada, ni en los hospitales del aguilita me pasaban esas cosas. Creo que quién reparte el presupuesto para estos nosocomios y esta Ciudad en general, debería pensar menos en albercas, pistas de hielo y bicicletas y pensar mas en todos estos insumos básicos.

En fín...