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Un domingo mas, aunque un poco raro.

La gente en las calles esta usando menos los tapabocas, creo que se han dado cuenta de lo incómodo que puede ser usarlos cuando no se los sabe poner uno.

En la mañana salí a correr para hacer fondo e hice 14 kilómetros, mis piernas no dieron mucho al final aunque en lo cardiovascular creo que puedo correr un poco mas, el próximo domingo correré 15 ó 16. Lo extraño fue que al terminar de correr di vuelta en uno de los pasillos de los viveros de Coyoacán y me encontré con un letrero, pintado en un árbol, con mi nombre o mas bien la forma corta "Lalo", justo como algunos me llaman y que me pedía hacer lo que dice aquel tango famoso de Gardel. Extraña y sutil coincidencia que hoy me sorprendió mientras trataba de recuperar el aliento. A ver si mañana recuerdo llevar una cámara para fotografiar ese mensaje, aunque no voy a subir la foto al blog.

Se viene una rara semana de contingencia, de salir a lo mínimo indispensable y de matar todo el tiempo posible en casa de la manera mas provechosa. Lo mas parecido que recuerdo a esto, fueron unos días de enero de 1991 en que la contaminación fue tan alta en la Ciudad de México que tuvimos que quedar en casa por 2 días después de un fin de semana, luego, por esas fechas EU comenzó su primera guerra del Golfo Pérsico contra Irak, y entonces recuerdo en los noticieros la mezcla de noticias, los días sin clases, sin actividades al aire libre y los locos de los gringos bombardeando a Sadam.

Imágen de: vortex bits en Flickr